La arquitecta Inés González Alvo es una de los que hizo posible ese diálogo entre actores diversos que fue el seminario sobre Movilidad Urbana que se desarrolló esta semana en la Facultad de Arquitectura. “Estoy estudiando la movilidad en el Sistema Metropolitano de Tucumán, poniendo énfasis en el aspecto social y en su importancia como derecho fundamental de las personas a desplazarse por la ciudad. Existen agendas internacionales que mencionan esto. Por ejemplo, en la Nueva Agenda Urbana de 2016 se estableció que la movilidad urbana debe ser sostenible, segura y accesible para todos”, afirma la docente de Urbanística 1 y Taller de Urbanismo y Planeamiento 1, integrante del Observatorio de Fenómenos Urbanos y Territoriales de la FAU-UNT, becaria doctoral del Conicet y doctoranda en Ciencias Sociales (orientación en Geografía) en la Facultad de Filosofía UNT.
Fallas de conectividad
El seminario que acaba de pasar es parte de las actividades de su plan de doctorado, que está en ciernes, pero que también, como ocurre con el trabajo de la Facultad de Derecho, ya muestra resultados. En 2014, González Alvo hizo un Estudio de Indicadores de Movilidad para el entonces Ministerio de Planificación Federal. “El resultado fue que para el caso del Simet, la red vial y el sistema de transporte son insuficientes para cubrir las necesidades de la población.
Aunque el servicio de transporte público alcanza al 89,9% de la población (casi el 90% de la población cuenta aunque sea con una línea de colectivo a menos de 500 m), se observa un grave problema de conectividad (aunque haya una línea de colectivo no implica que lleve a las personas a donde necesitan ir). La idea de este seminario -enfatiza-es identificar los problemas y los desafíos de la movilidad en el Sistema Metropolitano de Tucumán para crear una agenda que luego pueda servir de base para la implementación de políticas públicas en torno a la movilidad teniendo en cuenta una mayor equidad.