Por Belén Castellano
21 Marzo 2025
CAOS VEHICULAR. Los vecinos advierten que las horas de mayor circulación son al mediodía y a las 18. La Gaceta / Fotos de Belén Castellano
Desde hace más de un mes, el semáforo en la intersección de avenida Perón y Moreno, en Yerba Buena, dejó de funcionar tras una tormenta que afectó el sistema eléctrico. Esta situación ha generado un desorden en la circulación vehicular, con conductores que no respetan las normas y agentes de tránsito que deben intervenir para evitar accidentes. Mientras las autoridades esperan el repuesto dañado, vecinos, ciclistas y automovilistas conviven con una intersección caótica y peligrosa.
Infracciones constantes
Según informó José Garzón, director de Tránsito de Yerba Buena, el problema comenzó con la última tormenta fuerte. “Cayó un rayo y quemó los aparatos que estaban alrededor. Como consecuencia, no funcionan los radares de velocidad ni las pantallas que están allí. Estamos esperando el repuesto del controlador dañado. Se pidió a Buenos Aires y estaría llegando el lunes. Cuando lo recibamos, programaremos el sistema para que vuelva a funcionar”, explicó.
Mientras tanto, los agentes de tránsito deben regular la circulación. Franco, uno de los varitas que trabaja en el lugar, detalló: “Hace más de un mes que está así y desde que el semáforo dejó de andar, venimos a controlar el tránsito. Nuestro turno es desde las 15 hasta las 22”.
CELULAR AL VOLANTE. El agente muestra las infracciones que anotó.
Su compañero, Marcelo agregó que durante la mañana la luz funciona de manera intermitente, pero al caer la tarde se apaga completamente. “Cuando el tránsito empieza a mermar, nos retiramos. Afortunadamente no hubo accidentes, pero los conductores son muy imprudentes y pueden ocurrir. Ayer un hombre casi chocó por mirar el celular mientras manejaba. Cuando le hice la multa, me preguntó por qué lo sancionaba”, contó sorprendido por la reacción del conductor.
Se refirió a los ciclistas y señaló que nunca respetan el alto, pasan directamente y ahora se ven muchos que deben estar entrenando.
120 multas por hora
Marcelo también alertó sobre la cantidad de infracciones que detecta a diario. “Hago entre 100 y 120 multas cada hora y media. La mayoría, o casi todas, son por uso del celular al volante. Cuando la gente recibe la infracción, reacciona de forma violenta. Una vez una señora me escupió”, contó.
Vecinos preocupados
Los residentes de la zona también manifestaron su inquietud. Estefanía, una vecina, explicó que la calle Moreno es clave para quienes se dirigen hacia Mate de Luna, lo que genera un flujo constante de autos que deben doblar. “El mediodía y las 18 son los horarios más complicados. Si el semáforo no funciona, se vuelve un peligro para todos”, indicó.
Desde la perspectiva de los ciclistas, Brisa aseguró que el cruce es difícil y peligroso. “Hay momentos en que el semáforo funciona de manera intermitente, pero nunca sabés cuándo dejará de andar. Es complicado cruzar con los autos que salen desde Moreno y giran hacia la avenida. Se cruzan con todo”, relató.
Lourdes, una corredora que frecuenta la zona, mencionó su propia experiencia: “No soy de este barrio, pero vengo a entrenar acá. Hoy pasé en auto por el cruce al mediodía y fue peor que cruzar caminando. Tenés que mirar para todos lados”.
Mientras los días pasan y la solución depende de la llegada del repuesto, peatones, ciclistas y automovilistas continúan lidiando con una intersección que se volvió un punto crítico del tránsito en Yerba Buena.
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