El sector textil argentino, ante una grave crisis: "Hoy no se vende nada, ni nacional ni importado"
Luciano Galfione, presidente de la Fundación Pro Tejer, advirtió sobre la grave situación que atraviesa la industria textil en Argentina, con empresas que se ven obligadas a vender por debajo de sus costos para poder sostenerse.
"Las ventas están muy retraídas y los empresarios tienen que liquidar todo lo que tienen para afrontar la próxima temporada invernal. Eso significa muchas veces vender a pérdida para sostener el negocio y, sobre todo, las fuentes de trabajo", expresó a LA GACETA.
El dirigente explicó que el fenómeno se intensificó en enero debido a la caída del consumo y a la necesidad de los empresarios de generar capital para abastecerse de insumos para la temporada de invierno. "Hoy no se vende nada, ni nacional ni importado. Eso explica la deflación y el hecho de que cada vez estamos más fuera de competencia con los países vecinos", remarcó.
Galfione hizo hincapié en las condiciones macroeconómicas que afectan al sector. "Hace dos o tres años, Argentina estaba llena de brasileños y chilenos que compraban en nuestras zonas turísticas. Hoy es al revés. No cambió la matriz productiva, sino las condiciones macroeconómicas", sostuvo.
Consultado sobre la apertura de importaciones y su impacto en la industria textil, el presidente de Pro Tejer fue categórico: "El problema en Argentina no es producir, es comercializar. Comercializar en Argentina es muy caro. Durante todo 2024, lo que más cayó, además de la producción, fueron las importaciones, y los precios siguen siendo altos respecto a otros países. Si la facilitación siempre es hacia el producto importado, el precio para el consumidor seguirá siendo alto, pero lo que sí cambiará serán las fuentes de trabajo locales".
Sobre las medidas que el sector espera del Gobierno, Galfione señaló la necesidad de condiciones más equitativas. "Competimos con sistemas impositivos y costos laborales diferentes. En Argentina, más del 50% del precio de una prenda son impuestos. No depende de la industria nacional, sino de las condiciones estructurales del país", detalló.
El presidente de Pro Tejer también mencionó el caso de la marca Victoria’s Secret, que recientemente se instaló en Argentina con precios hasta tres veces más altos que en Estados Unidos. "¿El problema es la industria nacional? No. Esto lo advertimos hace años", afirmó.
Por otro lado, Galfione manifestó su preocupación por la pérdida de empleo en el sector, con ejemplos concretos como los despidos en la planta de Topper en Tucumán. "Si no facilitamos las mismas condiciones a la producción que a la importación, esto se profundizará", advirtió.