NOVELA: MEMORY LANE / PATRICK MODIANO - (Anagrama – Barcelona)
Patrick Modiano es un escritor de frases lineales, precisas y cortas. Los personajes están un poco perdidos y viven en una especie de letargo existencial. La memoria y el olvido parecen dos exergos de la misma moneda. Sus novelas trabajan con la ciudad y los entornos urbanos. El autor tiene una sutil y reiterada obsesión con las calles, los garajes, las casas, los bares y los pasajes. Tanto en Calle de las Tiendas Oscuras como en Villa triste y en El horizonte, los personajes viven en una pesadilla diurna, son marionetas manejadas por el pasado que es difícil de asir. No me refiero a un elemento religioso o místico sino a una dimensión humana, como si estuvieran desorientados, como si eso fuera una marca de su existencia.
En Memory Lane, recurre a una forma de la memoria, elusiva, elíptica, que roza los bordes del olvido. Modiano consigue que los lectores sintamos que el narrador está entre la desmemoria y el recuerdo. Un empleado de una editorial musical es el narrador del libro y llevado por otro empleado –Georges Bellume– asiste a las reuniones de un grupo de amigos. Se trata nuevamente de un viaje al pasado –pretérito difuso, pasado por el vidrio esmerilado de la vida, acaso como en las narraciones de Saer–, ya que el narrador tenía unos veinte años cuando se reunía con el grupo.
En las reuniones del grupo, el rojizo Doug cantaba una canción: Melody Lane. Así, como si fuera esa música que regresa desde el pretérito, la novela nos lleva a un tiempo que no volverá. El centro del libro está al final: el narrador habla con nostalgia de las reuniones perdidas. Le llegan las noticias de los personajes que veía a los veinte años. Uno de ellos se ha suicidado. El narrador descubre que había sido un furtivo nazi y que había escrito una opereta. Al llegar a París se había cambiado el apellido con la intención de modificar el pasado anterior al objeto de las evocaciones. Así como el narrador desviaba la atención de los lectores, el nazi había intentado trastocar su propio pasado. Modiano muestra que no existe un único pasado, sino que hay múltiples pasados y que en los entretelones se filtran los olvidos, las negaciones y el sinsentido. En Memory Lane, los personajes anhelan algo que no son y deliberan y se engañan a sí mismos. Quieren ser algo y no lo consiguen. Modiano ha escrito una novela sobre la realidad inalcanzable y las apariencias encubridoras.
“La canción Memory Lane hablaba de unos caballos que pasan al amanecer para no volver”, dice el narrador. Modiano escribe para contarnos la vida de esos personajes que viven pletóricos de sueños incumplidos: desean volver al pasado y descubren que el regreso es una utopía.
© LA GACETA
PERFIL
Patrick Modiano (Boulogne-Billancourt, 1945) recibió el Premio Nobel en 2014. Entre sus últimas novelas, traducidas al castellano, pueden mencionarse Un pedigrí, En el café de la juventud perdida, El horizonte, La hierba de las noches, Para que no te pierdas en el barrio y Recuerdos durmientes. Con Calle de las Tiendas Oscuras ganó el Premio Goncourt.













